Foto del diario
Para gobernar en la Argentina basta y sobra con tener un
buen testaferro, una campaña bien organizada y popularidad asistida por los
medios de prensa.
Luego de ganar en elecciones democráticas las personas elegidas se transforman, modifican su estilo
normal de vida y algunos se creen semi dioses.
Cuando mis hijas vieron estas imágenes me dijeron : -Papá ¡este es un patotero! ¡mirá como le habla
de cerca a ese señor, lo tiene que haber salivado!...
En fin, esta es la Democracia que nos toca vivir y apreciar.
Pero a mí me toca hablar de seguridad.
El mismo ejemplo del
Gobernador violento, provocador, mostrando la hilacha frente a la prensa, fue
el mismo sentimiento que viví durante la gestión peronista en el Ministerio de
Seguridad. Y se los vuelvo a decir públicamente,
me la aguanto aunque me sigan manoseando mi sueldo de retirado.
El gobierno le terminó de quitar al uniformado policial su
identidad, historia, profesionalismo. A los Jefes policiales les anuló la voluntad
de ser, de transformar la fuerza, de involucrarse desinteresadamente en los
asuntos sociales, porque cuando lo hacen siempre se asoma algún director
político y roba la impronta...todo "pal partido". Si te descuidas te borran la firma y ponen la de ellos, una costumbre muy usual en Seguridad.
Recuerdo varias Ordenes de Servicio firmadas por uno de sus
ciervos políticos que versaba:..."los Titulares de dependencia deberán informar periódicamente
cuanta reunión vecinal concurran a los fines de establecer organigrama mensual.
Asimismo deberán informar el resultado de las reuniones establecidas en un
plazo de 24 horas de finalizada las mismas, problemática planteada y cantidad de asistentes”.
Jefe policial las pelotas, en realidad eramos termómetros
sociales que informábamos los reclamos de la gente de la zona, su dolor, su
miseria, etc. Siempre con la misma respuesta desgarradora, "NO" tenemos policías, "NO" hay recursos, "NO" hay móviles, "NO" hay, "NO" hay y "NO" hay.
La orden política era: - no se les ocurra decir que no tienen policías!!!, ...algunos Jefes sumisos y de baja autoestima les seguían la
corriente, en el doble sentido de la palabra.
No me gustó para nada que personajes políticos que no habían
sido elegidos democráticamente de la solapa del Ministro viniesen a darnos
catequesis de seguridad, metodología de actuación policial y por último el
siguiente verso: - por favor recuerden que tenemos que bajar los decibeles de
la gente, explicarles que estamos haciendo todo lo posible. En realidad no hacían nada de nada por la
gente. Son y serán una mentira.
Cuando uno se deja usar como profiláctico una vez lo más seguro es que en la segunda vuelta te tomen de tarado y
en la tercera de sirviente o esclavo. No tendría nada de malo ser sirviente de alguien en
tanto el amo sea realmente brillante, honorable, profesional y académico. Pero como estas
condiciones no se están dando en las segundas, terceras, cuartas y quintas
líneas políticas me retiré antes que me hicieran una cama organizada.
En fin, como anécdota descubrí la
miseria que vivimos todos los argentinos por culpa de los mismos argentinos. Si
tenemos políticos corruptos, hay también Jefes corruptos y así sucesivamente
para abajo. Todo es viva la pepa, sálvese
quien pueda y chacota pura. La diferencia con las otras Instituciones del
Estado es que al parecer los cargos del Ministerio de Seguridad convierten a
las personas en "milicos políticos resentidos". Se transforman y comienzan a
utilizar el mando político sobre el policial, aprietan a los serviles a través
del miedo y la sanción, siempre sirviendo a una autoridad política de Casa de Gobierno. Todo
se hace en función de esa persona y el partido. Realmente una bosta organizada.
Basta de tanta hipocresía. Dejen por favor que el uniformado
trabaje tranquilo. Dedíquense a hacer política con mayúsculas y no quieran
saber más que el Papa, ¡por favor!.
Y los serviles ahora, ¿dónde se van a meter?.
Definirse es de machos, ¿sos político o policía?.
Definirse es de machos, ¿sos político o policía?.
Un detalle importante de mis 22 años de policía; cada vez
que tuvimos un Jefe policial líder de trayectoria comprobada, el sistema político lo bajó del
pedestal en menos que cantó un gallo. Lo que está pasando actualmente en
Mendoza es que la gente ha empezado a bajarlos uno a uno a ellos y eso me
genera mucha gracia.
El sistema político actual ocupa el 50% de su tiempo en
hacer daño a las Instituciones por temor, desconfianza, resabios del pasado,
etc.. Esto está produciendo daño irreversible especialmente en las fuerzas de
seguridad de todo el país. Queremos decirle a la gente que
este plan va a dejar secuelas irreversibles y de no ocuparse de
inmediato vamos a tener un incremento delictual importante, año tras año, mes a mes. Por eso esconden los índices estadísticos
mensuales, porque la verdad asusta.
El peronismo malintencionado se introdujo en la policía como un virus en la
sangre y sabemos bien quienes fueron sus mentores. Hoy la fuerza policial
carece de líderes policiales. Con gran dolor puedo decirles que el virus que
comenzó en 1998 ya es cancerígeno.
Recuerden que el Cáncer no tiene cura mis amigos y
compañeros. Basta con meses o años para que haya metástasis y en fin, a la tumba
nuevamente.
Tampoco existe la madurez institucional para sobreponerse a
ello. Mientras tanto estamos en manos de la delincuencia, siempre dos pasos
atrás.
Mi consejo: matar a las células degeneradas con quimioterapia.
SI HAY SEMEJANZA CON LA REALIDAD DE MENDOZA, ES MERA COINCIDENCIA.